Cernícalo vulgar

Falco tinnunculus. Es nuestro pequeño halcón, muy conocido porque convivimos con él, habita en torreones, tejados de iglesias, cortijos... Le encanta las áreas cultivadas dónde sobrevuela en busca de presas, con su característica técnica, que consiste en cernirce sobre los campos, para quedarse prácticamente inmóvil en el aire. Es un buen insecticida natural puesto que se alimenta sobre todo de saltamontes, langostas, grillos y demás insectos, aparte de topillos y ratones.